¿Cómo hacer un buen café en la cafetera italiana?
La creciente popularidad del café de especialidad ha hecho que cada vez más personas se interesen por tomar una bebida de calidad y rica en matices de sabor. No obstante, no todo el mundo puede tener en casa una cafetera de expreso de alto nivel. Por lo tanto, si te preguntas cómo puedes disfrutar de un buen café, lo mejor es saber hacer café en una cafetera italiana.
En Cafés Gometero, recomendamos a nuestros clientes poner en valor esta sencilla cafetera que permite obtener una excelente infusión de los granos molidos, siempre que se sigan una serie de pasos que no todo el mundo conoce.
Un poco de historia
La cafetera italiana o moka es uno de los pequeños utensilios de cocina más utilizados del planeta. En un momento en el que se beben al día casi dos mil millones de tazas de café, es difícil imaginar un hogar europeo o de América Latina que no cuente con una de estas jarras metálicas con varios compartimentos por los que pasa el agua vaporizada para convertirse en café.
Fue el italiano Alfonso Bialetti quien, en 1933, desarrolló este tipo de cafetera para conseguir en casa un café de tipo expreso, mucho más concentrado que el que se logra en las cafeteras por goteo.
De este modo, el uso de la cafetera italiana es la forma de lograr lo más parecido a un café de máquina de bar sin tener que hacer un gran desembolso. El ingenio de Bialetti, que ya ha superado los 90 años desde su creación, se ha puesto muy de moda en unos momentos en los que tomar un buen café es una necesidad para cada vez más gente.
¿Cuál es su funcionamiento?
Para preparar un buen café, es necesario conocer a la perfección su funcionamiento y, para eso, te vamos a ofrecer una serie de pasos para conseguir un café que deleite a todo el mundo.
Elección de un buen café
Comprar café gourmet es el primer consejo que damos desde a quien quiera lograr un excelente resultado con su cafetera moka. De nada sirve seguir fielmente todos los pasos ofrecidos por los expertos baristas, si no se cuenta con una materia prima recogida, lavada, tostada y molida siguiendo los mayores estándares de calidad.
Para conseguir un café exquisito, lo mejor es adquirir el grano o la molienda en nuestra tienda especializada. Además, estamos encantados en ayudar al cliente a encontrar el tipo de variedad y tueste más adecuado para sus gustos y lograr unos matices de sabor únicos.
Llenar el depósito de agua
El depósito de agua debe llenarse hasta justo por debajo de la válvula para hacer café en una cafetera italiana. Además, se debe usar agua de calidad, ya que mezclar un café bueno con un agua de grifo con mal sabor es como servir caviar sobre pan de molde. Por ello, seleccionar un agua mineral embotellada suele ser lo más adecuado.
Además, recomendamos poner el agua en el depósito tras calentarla previamente. Esto hará que el cambio de temperatura sea más rápido, que el agua se evapore antes y que el café no sufra por el calor del fuego, conservando todas las características organolépticas.
El habitáculo para el café
El cacillo de estas cafeteras está perfectamente preparado para servir el número de tazas exacto. La relación entre el agua que cabe en el depósito y el café que entra en el habitáculo con filtro es exacta, por lo que no hay que invertir tiempo en pesar el café.
Es importante también tener en cuenta que no es necesario apretar los cafés gourmet con la base de la cuchara, sino que es más interesante dejar espacio para que el agua pueda subir sin ningún problema.
Cerrar bien la cafetera
Cerrar la cafetera bien es clave para que el agua no se escape por ningún resquicio y el vapor suba de manera adecuada y sin perder temperatura. Hay que tener cuidado de no sobrepasar la rosca y de no quemarse.
De manera adicional, es imprescindible hacer una revisión de la goma de vez en cuando, para que esta esté en perfecto estado; hay que recordar que una goma con moho o desperfectos puede cargarse el café.
La tapa siempre abierta
Aunque parezca contrario a lo que dicta el sentido común, la cafetera debe ponerse en el fuego con la tapa abierta. Esto ayuda a que el vapor escape correctamente y además llena la cocina del inconfundible aroma del café recién hecho.
El fuego no debe estar muy alto, puesto que el agua debe pasar al estado de vapor, pero lo ha de hacer de una manera controlada y continua. Para ello, la potencia de calor del fogón debe ser media o baja.
Cerrar y servir
Una vez que se escucha el famoso «gruñido» de la cafetera, cuando todo el líquido ha subido al compartimento superior, es el momento de cerrar la tapa, servir y disfrutar inmediatamente de uno de los placeres cotidianos más maravillosos de la jornada: el café recién hecho.
Estos son los principales pasos que te recomendamos desde Cafés Gometero para lograr una bebida perfecta, equilibrada, aromática y redonda. Recordarlos y aplicarlos en el día a día no es complicado, y hará que la calidad de tu café mejore exponencialmente.